Quiero estar siempre junto a ti (microcuento)

El hombre se levantó y estiró su dolorida espalda. Dormir en el sofá le producía dolores en la espalda y en el corazón. Los primeros se debian a que el maltrecho sofá no era lo suficientemente largo para él y tenía que dormir encogido. Los segundos porque siempre que dormía en el sofá era por haber discutido la noche anterior con su esposa. Últimamente dormía muchas noches en el sofá. Las discusiones ocurrían con más frecuencia y cada vez se gritaban más. No podía evitar temer por su matrimonio, él aun la amaba pero las circunstancias no eran las mejores.
Entró en la cocina y ella estaba de espaldas, mirando fijamente el tostador esperando a que saltasen las tostadas.
- Buenos días - le saludo él intentando parecer cálido.
El silencio fue su única respuesta, ella no se movió.
- Cariño. Se que ultimamente nuestra relación no esta en su mejor momento. Pero yo aun te amo. Te juro que aunque no lo parezca quiero pasar el resto de mi vida junto a ti
El sonido del teléfono a su espalda le interrumpió. En cierta forma fue un alivio.
- ¿Dígame?
- ¿El señor Fernando Parra? - le preguntó una voz que pese a venir de una persona sonaba tan fría como la de una máquina
- Si
- Le llamo del hospital. Lamento informarle que hace media hora su mujer ingresó víctima de un atropello. Se intento hacer todo lo posible pero falleció a los poco minutos de su ingreso.
Se quedo callado, en ese momento sintió un escalofrío recorriendo su espalda hasta la base de su cráneo.
- Lo siento - Esa fue la única vez que la voz sonó humana.
Detrás suyo oyó como ella se acercaba....¿Ella? Quizás fuera mas apropiado llamarle eso.
Unos fríos brazos le abrazaron cruzándose sobre su pecho. Y una voz, que era idéntica a la de su mujer, lo cual aun la hacia más horrorosa, le dijo:
- Cariño yo también te amo y quiero estar siempre junto a ti.

1 comentario:

  1. buenisimo, me gusta ese tipo de relatos, esos de factor sopresa, y que le dejan al lector algo de la historia, que lo hace pensar mas tarde, muy bueno y con su permiso si Ud no se opone, compartire este cuento con mis ammigos, gracias

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